Vine aquí i seuràs un poc
que es camí és costós i llarg.
A Sineu, tenim Sant Marc
Sant Sebastià i Sant Roc.
A Sineu tenim un patró secundari que és sant Marc ―la Mare de Déu és la titular de la parròquia i patrona de la vila―, i dos de copatrons, sant Sebastià i sant Roc. Aquests dos darrers diuen que són advocats contra la pesta i pel seu caràcter protector foren escollits pels nostres avantpassats. I vos demanareu per quin motiu escolliren l’Evangelista per patró de la nostra vila?
El 1914 [01] ara fa cent deu anys, el prevere Guillem Ramis i Vanrell (Sineu, 1861 – Cala Rajada, 1923) va fixar per escrit l’origen popular de la festa patronal:
«Hay fechas verdaderamente memorables, que permanecen escritas en el corazón de los pueblos. Sineu, el 25 del corriente mes [abril], solemniza una de esas fechas, conmemora uno de aquellos sucesos que la tradición ha venido trasmitiendo hasta nosotros, sin que podamos precisar el año, ni el siglo en que tuvo lugar».
Encara ara conten els majors que l’abril és un dels mesos més crítics per a l’agricultura; sol ser poc plujós i les seves aigües són molt profitoses. La dependència del cultius cerealístics a la nostra vila sempre fou cabdal, una mala anyada significava moltes pèrdues i, en alguns moments, la carestia d’aliments bàsics. Ramis relatava que:
«Una terrible y espantosa sequía azotaba cruelmente nuestros campos, apareciendo éstos completamente marchitos y agostados, secas y agotadas nuestras fuentes, esterilizados los sudores y energías de nuestros campesinos y cundiendo con tal motivo, en el seno de las familias, una tristeza y desolación indescriptibles.
El terror se había apoderado del corazón de los padres, viendo con indecible pena que no podían dar a sus hijos el bocado de pan y el sorbo de agua que les pedían.
Profundamente consternados ante el castigo severísimo que sobre ellos se cernía, se acogieron humildes y compungidos a la sombra benéfica y dulce de sus creencias religiosas, confesándolas las únicas salvadoras en medio de aquella crítica y desventurada situación en que se hallaban. Y todos a una, ricos y pobres, grandes y pequeños, sabios e ignorantes, coadunados en devota y ferviente plegaria, imploraron del Cielo pronto y eficaz remedio a sus imperiosas necesidades, comprometiéndose a venerar perpetuamente por su especial y amadísimo Patrono al Santo que, intercediendo por ellos desde el Cielo, les alcanzase la suspirada gracia de la lluvias.
Y he aquí que el 25 de Abril, en que Nuestra Madre la Iglesia solemniza la memoria del ínclito evangelista de Cristo, el esforzado mártir de Alejandría San Marcos, derramó el Cielo sobre este pueblo copiosísimas y saludables lluvias, que fertilizaron felizmente nuestras tierras, llenaron nuestras fuentes y devolvieron a muchos corazones angustiados el consuelo y alegría que les faltaba.
San Marcos, el glorioso evangelista de Cristo, fue el que presentó ante el trono de su Divino Maestro las lágrimas y súplicas de los atribulados sineuenses, el que se conquistó la gratitud y amor de este pueblo, pidiendo por él misericordia y perdón.
Por esto, su día, el 25 de Abril de todos los años, será siempre de recuerdo imperecedero para todos los moradores de Sineu, porque este día fue el día de las lluvias abundantes y provechosas para las sementeras, el día de regocijo universal para tantos corazones entristecidos, el día que marcará una fecha verdaderamente memorable en los fastos de nuestra historia.
Desde entonces, nuestro Magnífico Ayuntamiento, en el mentado día, lleno de la más respetuosa satisfacción, viene tributando al glorioso evangelista San Marcos, en nombre de este pueblo a quien representa, los más solemnes y esplendorosos cultos, honrándolos con su asistencia, demostrando con ello el amor, la predilección y la gratitud profunda que siente en su pecho por su especial abogado y gloriosísimo intercesor».
I encara més, com que va ploure, els caragols sortiren a pasturar, i també aquest dia cuinaren caragols i escaldaren un parell de sopes. No falta any que els sineuers per la festa patronal mengin aquests gasteròpodes amb closca.
Al Calendari Folklòric de Mallorca, recollit pel P. Rafel Ginard i Bauzà (Sant Joan, 1899 – Artà, 1976), hi apareix compilat a Sineu el proverbi «Vuit dies ençà, vuit dies enllà s’aigua de Sant Marc no pot faltar» [02] que referma aquesta contarella tradicional.
Amb posterioritat, l’eclesiàstic i historiador Joan Rotger i Niell, Querol (Sineu, 1885 – 1961) establí el vertader origen del patronatge, elegit pel Consell de la Universitat de Sineu el 29 de juny de 1645. [03]
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[01] Correo de Mallorca, periódico católico, any V, núm. 1457, de 27 d’abril de 1914, pàg. 1.
[02] GINARD i BAUZÀ, Rafel (2022) / Edició a cura d’Andreu RAMIS i Miquel SBERT Calendari Folklòric de Mallorca. Primavera. Barcelona: Saïm Edicions, pàg. 124.
[03] Vegeu “El patronatge de Sant Marc Evangelista” a ALOMAR i VANRELL, M Magdalena (2017) El panegíric de Sant Marc Evangelista de Mn Arnau Mateu (1890). Aproximació a un exemple d’oratòria sagrada. Sineu: Ajuntament de Sineu i Parròquia de Santa Maria de Sineu.
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